En la casa de Adolfo había una frase que era una verdad sabida y que su madre repetía incansablemente por que se la había oído repetir a la abuela paterna del ganadero, la madre de Adolfo y Victorino Martín: “En este casa eres más importante si eres animal que si eres persona”.
Esta frase demuestra una filosofía de vida, la de una familia cuya pasión es la ganadería y cuya forma de vivir y de estar parte de un inmenso conocimiento del ganado y el campo y una fidelidad al animal que permite esa forma de vida. Esa frase indica unas marcadas prioridades, un inconmensurable amor al toro, al toro en su hábitat natural y al toro bravo, sin capaduras ni matices, en la plaza. La integridad del toro es una máxima que no tiene que ser enunciada en esta casa ganadera por que es parte consustancial e indisoluble de ella.
Hablar con Adolfo Martín es hablar con un aficionado cabal al toro, que conoce de querencias, terrenos, reatas, encastes, plazas, aficiones, verdades y mentiras. No pontifica, no es su manera, sabe oír, pregunta para saber, por que es un sabio del campo, indaga en la sabiduría ajena para interpretar la verdad a la forma de los viejos mayeúticos, en su presencia el aficionado pierde la noción del tiempo con su conversación, salpimentada con anécdotas, historias familiares, reflexiones, añoranzas y sueños.
Este es Adolfo Martín.
Es un ganadero al que Madrid le ha dado mucho y que ha dado mucho a Madrid, ¿Sigue siendo la plaza que da y quita?, Sin ninguna duda, es la plaza más importante del mundo y triunfar en Madrid te permite elegir donde vas a lidiar el resto de la camada.
Lidia una parte de su camada en Francia, ¿que tenemos que aprender en lo taurino de aquel país?
Muchas cosas, pero destacaría el importante lugar que se da al aficionado, las comisiones tienen muchísima fuerza y al ser decisiones que no quedan en manos de una sola persona se es mucho más justo: quien triunfa repite al año siguiente y quien fracasa estará unos años castigado.
Ha ido aumentando el tamaño de la camada, como se consigue esto manteniendo una estricta selección.
Variando mucho los sementales, yo tengo 250 vacas y una media de diez doce sementales, unos tentados con el caballo que después de padrear se lidian, otros novillos los tenemos un años con las vacas, sementales de mucha confianza de la casa, de esa forma se mantiene un herradero de 100 machos de los que lidio entre los sesenta, sesenta y cinco al año.
José Tomás se dejo un toro marcado con la V, vivo en las Ventas ¿Qué es lo que más le dolió aquella tarde?
Todo me resultó muy amargo, es un torero al que le tenía mucha fe, de familia, del pueblo, muy vinculado. Quizá, lo peor es que creo que me utilizó, no me gustó la actitud, no es que no pudiera matarlo, lo intentó pero luego se quitó de allí y dejo que pasará el tiempo, me hizo mucho daño. Nunca he hablado con el torero de eso, una espinita en el camino de un ganadero.
¿Como entendió el gesto de Talavante de matar su encierro en San isidro este año?.
Normal, el sabe lo que se cría en mi casa, ha tentado mucho en casa y ha visto como sale lo nuestro, que da posibilidades de triunfo, que sirve y cuando se triunfa es de más valor por que nuestro toro transmite mucha emoción. Estuvo muy bien con el sexto, si lo mata hubiera sido un triunfo importante, pero deja buen regusto.
¿Sigue pensando que sus toros y las figuras del toreo actual están mejor alejados que encartelados juntos?
Si, a mi nunca me ha puesto ningún torero en ninguna plaza Me da miedo que empiecen a pasar por mi casa la ristra de veedores, a uno no le gusta un toro, a otro dos y al final llevas una corrida que no es la que tenías pensada para esa ocasión y esa plaza. Mejor cada uno por su lado, las figuras por un lado y Adolfo Martín por otro, si las figuras empiezan a pedir mi ganado, malo, algo estaré haciendo mal, esa es la filosofía de esta casa y no creo que sea buena cambiarla.
Va más cómodo a una plaza de tercera donde se lleva lo que quiere que a una plaza como la de Madrid donde el nivel de exigencia puede ser mayor en cuanto a volumen del toro?
Bueno, el 90% de la camada se lidia en plazas de segunda y de tercera y estamos a gusto lidiando en esas plazas, siempre llevamos corridas dignas, con pinta y reata para embestir, pero en Madrid y el resto de plazas de primera es donde hay que dar el do de pecho, en esas ocasiones es donde uno se juega la temporada, el prestigio de la ganadería y es lo que después te permite ir a otras plazas donde vas más cómodo, por que llevas lo que quieres, pero nervios y tensión siempre se sufre por que quieres que todo salga bien.
Fiereza, bravura, dureza, toreabilidad, nobleza, fijeza, casta, temple.. ¿Qué no le puede faltar a un toro de lidia en el siglo XXI?
Tiene que decir mucho, hoy se quiere un toro que sea verdad, que transmita emoción e importancia. Pero tiene que dar la posibilidad de que se le haga una faena lucida, el toro tiene que humillar, y tener disposición al temple. Nadie puede pretender en
estos tiempos que un toro haga muy buena pelea en el caballo y que después no tenga un pase.
